viernes, 24 de agosto de 2012

EL SOBERANO¿SOBERANO CULPABLE?.


EL SOBERANO  ¿SOBERANO CULPABLE?.

 

El candidato del gobierno comunista de Venezuela, acostumbrado, desde hace catorce años, a mentir de manera reiterada y con descaro, sigue empleando el término SOBERANO para referirse al pueblo y de esa manera engatusar a alguna gente nuestra, que vive pendiente de sus cantos de sirena.

 

Sin embargo, la  SOBERANIA como tal, no le es reconocida por él a ese pueblo al  cual trata con menosprecio achacándole todos los males del país, habidos y por haber, como consecuencia de la  pésima gestión del régimen que  encabezado por él, está enconchado en Miraflores; así tenemos para muestra los siguientes botones:

 

Ante las deficiencias del servicio eléctrico, en lugar de sancionar a los directivos de las empresas eléctricas, como responsables de la mala gerencia del sector,  aplica multas a los usuarios (SOBERANO), y les califica  como culpables  de  la debacle  energética solo por haber  consumido  la energía  necesaria para  su supervivencia.

A ese pueblo soberano se le castiga  con un aberrante y cubano chip, acusándole del contrabando de gasolina, gasoil y otros derivados de hidrocarburos, cuando todo el país sabe que ese contrabando de combustibles  es promovido, impulsado y protegido por los más  altos jerarcas civiles y militares del régimen.

 

La inseguridad que sufre el país  se traduce  en permanentes sicariatos, asesinatos, extorsiones, secuestros, etc. en contra del soberano y el régimen pregona que todo esto se debe al placer  que siente el pueblo por  estar  en la calle, por pasear sanamente  como antes lo hacía, y a cambio le ordenan “recomienda”, que no salga de sus viviendas para que no le pase nada. Pese a este aberrante insulto  a la inteligencia  de nuestros compatriotas,  son muchos  de ellos los     que han sido asesinados en sus propios  domicilios.

 

La situación del sistema vial en el país es pésima; el régimen dice que el culpable es EL SOBERANO porque le gusta pasear demasiado y eso produce el deterioro de las vías.

 

Los productores agropecuarios del país (el SOBERANO), son castigados trayendo productos importados de otras naciones aliadas al régimen, reemplazando así la producción nacional y el déspota manifiesta que el culpable de todo es el SOBERANO, “por querer consumir solo productos importados”.

 

La prestación de los servicios de salud se ha deteriorado  de manera vil y agigantada, pero el régimen manifiesta que la culpa la tiene el SOBERANO, por su costumbre de enfermarse a cada rato.

 

Las condiciones salariales del SOBERANO, se han deteriorado de manera escandalosa, y el régimen sostiene que el culpable de todo es el pueblo trabajador (SOBERANO), por haberse acostumbrado a disfrutar de ingresos elevados con lo cual pretende impedir que se mantenga el alto nivel de vida de los revolucionarios de otros países, a los cuales el régimen sostiene con donaciones multimillonarias.

 

El sistema educativo se ha venido deteriorando aceleradamente por las incongruentes políticas educativas, sin embargo el régimen afirma que el único culpable es el pueblo (SOBERANO) que no gusta del estudio.

 

Las universidades nacionales (Autónomas y Experimentales) están de capa caída por la asignación deficitaria de recursos presupuestarios. Pero el régimen acusa a estas instituciones por permitir el ingreso de la mayoría del pueblo venezolano (SOBERANO) “porque todos ellos quieren ser doctores”.

 

Los representantes gremiales y sindicales reclaman mejoras para sus representados y el comandante candidato del régimen comunista les responde que eso no es posible pues el comunismo, al no creer en la libertad sindical, no acepta que el SOBERANO pueda participar en esas organizaciones, y por tanto estas deben aceptar las migajas que a bien tenga el régimen asignarles.

 

El sistema comunicacional oficial tiene cada día una menor penetración en el pueblo (SOBERANO), como consecuencia del tratamiento sectario, parcializado, excluyente y soez de los programas que transmite, de la falta de ecuanimidad en las noticias que difunde, pero el régimen achaca la culpa de todo al SOBERANO,  “catalogándolo de VENDE PATRIA”, porque a cambio al pueblo (SOBERANO), le gusta ver y oír los medios privados cuyas transmisiones son mas ecuánimes, se apegan mas a la verdad.

 

El régimen acusa a la mayoría de la población (SOBERANO) de originar con su posición la violación de la Soberanía Nacional; pero en la práctica coloca invasores cubanos y de otras nacionalidades adláteres en cargos de vital importancia para los venezolanos incluyendo las fuerzas armadas, y los registros civil y de la propiedad.

 

La administración de reservas internacionales  debiera ser manejada de manera equilibrada por el régimen. Sin embargo el candidato del gobierno comunista  pregona que la culpa de la disminución de las mismas la tiene el pueblo SOBERANO pues le gusta viajar en exceso al exterior.

 

La infraestructura dedicada al turismo, en su mayoría  mal administrada por el régimen o invadida con su anuencia, está en condiciones deplorables. el régimen sostiene que el culpable del deterioro es el pueblo (SOBERANO), pues maltrata esas instalaciones. ¿Serán culpables entonces todos los damnificados y  abandonados  a su  mala suerte  por  el régimen?

Déficit de Vivienda: el régimen, constitucional y legalmente está obligado a solucionar este problema; sin embargo no lo hace y culpa del mismo al pueblo (SOBERANO), al que acusa de haberse acostumbrado a vivir en casuchas insalubres y en zonas de alto riesgo y que no les guste vivir cómodamente.

 

El transporte público, es otro problema de muy alta factura, al cual el régimen le escurre el bulto y asevera que el deterioro de las unidades es culpa de los usuarios (SOBERANO) que no sabe comportarse a la altura y destruye las mismas.

 

El derecho a protestar o a manifestar descontento está consagrado en la Constitución y Leyes de la República. Sin embargo el régimen asegura que las manifestaciones realizadas por la población (SOBERANO) son expresiones propias de los simpatizantes del imperio, y de los enemigos de la patria.

 

La Constitución y Leyes establecen como responsabilidad de los gobernantes la prestación de medidas de seguridad a los ciudadanos cuando estos desarrollan actividades de carácter político; sin embargo el régimen los acosa con medidas policiales, militares, parapoliciales  y paramilitares cuando se desarrollan estas actividades ciudadanas, aduciendo que esas actividades obedecen al imperio y los enemigos de Venezuela.

 

Con la enumeración anterior pretendemos demostrar la nefasta costumbre del régimen castro comunista y su candidato presidencial a evadir responsabilidades que les conciernen y tratar de endilgar la culpabilidad de de todos los problemas que provoca su incapacidad manifiesta, al pueblo (SOBERANO), ya que este se niega rotundamente a someterse a un régimen de esclavitud y aspira alcanzar mejores condiciones de vida. Es por ello que los Venezolanos SOBERANOS andamos transitando el nuevo camino que culminará el 7 de octubre con los resultados electorales los cuales  nos permitirán la recuperación de la verdadera PATRIA, que todos, sin distingo de colores aspiramos; una PATRIA DEL SOBERANO Y PARA EL SOBERANO, no un enclave comunista dirigido por la camarilla castro comunista cubana.

 

Ramón Daniel Contreras Barragán

Profesor Titular Jubilado de LUZ

C.I. Nº v- 1.904.851

 

 

 

 

 

 

 

 

 

sábado, 4 de agosto de 2012

CHAVEZ, EL SALVADOR


CHÁVEZ, EL SALVADOR



El candidato comunista a la presidencia de la republica de Venezuela, en una muestra más de su egolatría, aparece en algunos afiches con eslóganes mentirosos como el de Chávez el corazón de mi patria. Siempre con sus frases rebuscadas quiere volver a engañar a un noble pueblo que durante casi 14 años ha soportado las más grandes penurias sufridas por nuestra patria en sus 212 años de independencia. Para demostrar su nefasta misión de Salvador de la Patria, como él se hace llamar por sus publicistas y conmilitones, a continuación mencionaremos una serie de actos que demuestran su verdadera intención de “SALVADOR DE LA PATRIA”.

Subyugar el destino del país a los designios de la satrapía castrista de Cuba.

Dilapidar los recursos provenientes del petróleo, efectuando regalos a diestra y siniestra a otros países, en su mayoría gobernados por personajes de su catadura, verdaderos chupasangres de las entrañas de nuestro país.

Reconocimiento de regímenes tiránico-dictatoriales, que se han distinguido por la violación de los derechos humanos de sus connacionales.

Acusar de forma cobarde e indecente por sus 14 años de fracasos en la conducción del gobierno, al imperio mismo; con ese cuentico quiere seguir atacando de palabra al país del norte, cuando en realidad sigue medrando de los ingresos provenientes de los Yankis.

Ataque a otros países por sus intenciones armamentistas siendo que en el nuestro, gran parte de los impuestos y demás ingresos ordinarios que pagamos, se utilizan en la compra de chatarra militar a países como Rusia y China con la tan pregonada mentira de la defensa de nuestra “Soberanía Nacional”.

Horas y horas hablando de las “bondades” del proyecto Socialismo del Siglo XXI, simple comunismo ramplón y rastrero, y en realidad no producimos ni siquiera lo que comemos.

Vanagloriándose día a día de encabezar un gobierno obrerista o del proletariado por excelencia y en contrapartida maltrata a los trabajadores públicos, a los cuales ni siquiera se les reconocen y menos cumplen los Contratos Colectivos, les mediatiza y desconoce sus derechos sindicales.

Pregona las “bondades” del sistema de educación basado en la formación del “hombre nuevo” que sólo persigue la formación de una clase de moderna esclavitud de mendicantes intelectuales, dependientes de las dádivas del régimen.

Destruye toda la infraestructura del país para cumplir órdenes de su padre putativo Fidel, con la finalidad de convertir a Venezuela en un cementerio de edificaciones como es Cuba.

Politización de las Fuerzas Armadas para acabar con su profesionalidad y convertirlas en una especie de guardia pretoriana a su servicio, para sus fines de perpetuarse en el poder.

Arrasa con las universidades públicas, autónomas y experimentales, al negarles los recursos para su desarrollo y a cambio sigue en su empeño de crear mamotretos que pretende llamar universidades.

Los hospitales y demás centros de atención sanitaria han sufrido en estos catorce años el peor tratamiento conocido y han sido convertidos en verdaderos cementerios para los venezolanos.

El sistema penitenciario ha sido convertido por obra y gracia del “salvador” en verdaderos centros de poder, a tal punto que los verdaderos jefes de estos centros no son los que designa el régimen, sino los delincuentes que en ellos residen.

Se jacta el “salvador” de haber logrado la independencia de Venezuela, cuando en realidad ha sometido su destino a los intereses de otros países gobernados por sátrapas oportunistas de su misma talla.

La inmensa cantidad de puestos de trabajo, despojados a los venezolanos, la ocupan ciudadanos de otros países – China, Cuba, Irán, etc. – condenando al buhonerismo a los nuestros, ocupación marginal y nada estable que crece incansablemente.

Ha desmantelado el cuerpo diplomático y consular profesional, formado durante varias décadas, para sustituirlo con personas que no tienen ni los más elementales conocimientos del oficio y cuya mediocridad ha puesto en ridículo a Venezuela ante el mundo.

Una de sus promesas iniciales, la de acabar con los niños de la calle, se ha ido cumpliendo; ahora esos niños están en las cárceles o en los cementerios, ya no son niños y mucho menos de la calle, sin embargo el salvador se sigue llamando igual, no ha dejado de llamarse Hugo como lo prometió.

Prácticamente quebró a la gallina de los huevos de oro, PDVSA, empresa que actualmente ve disminuida su producción día a día y la mengua del proceso de refinación de productos finales es de tal magnitud, que tenemos que importar gran cantidad de la gasolina y otros derivados para suplir el consumo interno, por cierto, comprándole a los imperialistas del norte.

Con estas innobles y descaradas acciones del régimen y de su mandamás, pretende el candidato comunista seguir engañando a los venezolanos que en alguna oportunidad creyeron en sus cuentos de camino, y que ahora se encuentran desencantados totalmente por los resultados a la vista.

El gigantesco crecimiento de la deuda contraída por el régimen y a nombre del estado, prácticamente ha hipotecado al país y comprometido de manera irracional a las próximas generaciones, sin que sepamos los habitantes donde están los reales provenientes del sinnúmero de préstamos contratados y mucho menos para que se utilizaron esos recursos. También sería conveniente que nos explicaran a los venezolanos donde están las reservas en oro que tenía nuestro país.

La grosera actuación del candidato comunista en estos nefastos catorce años, ha conseguido la división de los venezolanos en dos porciones que se tratan como si fuesen enemigos, más no como adversarios desde el punto de vista ideológico.

El candidato comunista habla, habla y habla de salvar el planeta, pero no se manifiesta en absoluto con relación a la inseguridad reinante en Venezuela, la cual en los últimos catorce años ha cobrado la pequeña cantidad de más de 150.000 víctimas

Visto este desastre en el que se ha convertido a Venezuela, por obra y gracia del aspirante comunista  a la reelección y su corte de aduladores incapaces de sacar adelante al país, creo conveniente resaltar que ya Venezuela no necesita de este tipo de SALVADOR, y que el eslogan citado al principio debiera decir Chávez el destructor de mi patria.

Como venezolano que ya ha recorrido la mayor parte del camino en este tránsito terrenal y esperanzado en un mejor porvenir para los jóvenes, nuestros hijos y nietos, creo firmemente que ya llegó la hora de abrir un nuevo camino para rescatar a nuestra Venezuela de las manos de tan nefasto “SALVADOR”.



Ramón Daniel Contreras Barragán

C.I. V-1.904.851

Profesor Titular Jubilado de LUZ